ESTUDIANTES
Julie Brasil[1]
El cambio climático no es solo una amenaza, es el problema que define nuestro tiempo. Sus repercusiones son de gran alcance y afectan a ecosistemas, economías y sociedades de todo el mundo. Ante esta crisis optamos por la esperanza y la resiliencia, reconociendo que juntos tenemos el poder de lograr un cambio transformador. Nos negamos a ser espectadores pasivos ante la degradación medioambiental y aprovechamos este momento para catalizar la acción e inspirar a otros para que se unan a nosotros.
Cyrus Kabiru[2], artista autodidacta de Nairobi, Kenia, nos guía a través de su práctica multidisciplinar que mezcla moda, escultura y fotografía. Su obra está realizada con materiales reciclados y se centra en cuestiones contemporáneas del consumismo, recordándonos la importancia de reutilizar los recursos y reducir los residuos en la lucha contra el cambio climático.
La sostenibilidad no es una elección, sino un modo de vida. Imaginamos comunidades alimentadas por energías renovables, donde las tecnologías verdes impulsan el crecimiento económico y la innovación. Imaginamos un mundo en el que los bosques florezcan, los océanos rebosen vida y la biodiversidad prospere. Soñamos con ciudades donde el aire y el agua limpios sean derechos fundamentales.
La delicadeza del artista japonés Azuma Makoto[3] nos reconforta. Sus impresionantes “esculturas botánicas” desafían nuestra percepción de la naturaleza y nos invitan a reconectar con el mundo natural. Nos recuerdan la profunda interconexión de todos los seres vivos y la urgente necesidad de proteger nuestros preciosos ecosistemas. Prestamos atención a su llamamiento para preservar y nutrir la biodiversidad que sustenta la vida en la Tierra.
Defendemos la justicia climática. Movilizamos nuestras voces, talentos y energía colectiva para exigir políticas audaces que den prioridad al planeta sobre la ganancia. Aprovechamos el poder de la educación para dotar a las generaciones futuras de los conocimientos y habilidades que necesitan para convertirse en guardianes del medio ambiente. Promovemos una cultura de la sostenibilidad en la que la conservación y el consumo responsable sean la norma y no la excepción.
Nos obsesiona la instalación Ice Watch del artista islandés Olafur Eliasson[4], que transporta enormes bloques de hielo desde Groenlandia hasta las principales ciudades del mundo y nos presenta a la realidad tangible del deshielo glaciar. Una obra que se une a la acción en espacios públicos “Monumento Mínimo” de la brasileña Néle Azevedo[5], en la que miles de esculturas de hielo de 20 centímetros de altura de personas se derriten y nos recuerdan la amenaza existencial del calentamiento global como una cuestión ética.
Estamos juntos y somos interdependientes. Tierra, agua, aire, animales, plantas y seres humanos sin jerarquía, en la misma condición, frente a una urgencia planetaria que exige un cambio de paradigma en el desarrollo de las naciones que se aleje del actual nivel de consumo. El hombre no es el “rey” de la naturaleza, sino un elemento constitutivo de ella. Nosotros somos naturaleza.
Nos inspira el artista aborigen australiano[6], cuya vibrante obra honra las tradiciones indígenas y pone de relieve la profunda conexión espiritual entre la humanidad y el mundo natural. Hemos aprendido de la sabiduría indígena a esforzarnos por vivir en armonía con el planeta, respetando sus elementos como dones sagrados confiados a nuestro cuidado.
Reconocemos la interconexión de la degradación medioambiental con el aumento desproporcionado de la desigualdad y la injusticia social en las comunidades marginadas y vulnerables. En el camino hacia un futuro sostenible, nos fortalecen la diversidad y la unidad. Independientemente de nuestros orígenes o circunstancias, nos une nuestra humanidad compartida y deseo común de proteger el planeta para las generaciones futuras.
Celebramos la diversidad de la humanidad y recordamos la responsabilidad colectiva que compartimos de proteger nuestro hogar común. Nos unimos como comunidad global, trascendiendo fronteras y divisiones, para defender la justicia climática y garantizar que todas las voces sean escuchadas en la lucha contra la degradación medioambiental.
Construimos un mundo más verde, justo y mejor, adoptando prácticas más ecológicas en nuestra vida cotidiana: reciclamos, compostamos, reutilizamos, reducimos residuos, utilizamos productos respetuosos con el medio ambiente, caminamos, vamos en bicicleta o utilizamos el transporte público siempre que es posible. Consumimos menos carne, evitamos imprimir en papel, adoptamos mascotas en lugar de comprarlas, compensamos nuestras emisiones de carbono y nos mantenemos informados. Nuestras acciones dicen más que las palabras.
Nuestro grito es de acción por el clima mundial. Unidos para cumplir nuestro compromiso compartido con la Tierra y todos sus habitantes. Aprovechamos el poder transformador del arte de todos los continentes para inspirar el cambio y dar forma a un futuro más sostenible. Alzamos nuestras voces en solidaridad con aquellos cuyas vidas son más vulnerables a los impactos del cambio climático, amplificando sus historias y abogando por la justicia. Cultivamos una cultura de empatía, compasión y resiliencia, reconociendo que el destino de nuestro planeta está entrelazado con el destino de la humanidad. Es en el abrazo de la naturaleza donde encontramos nuestro verdadero yo, y es en su preservación donde hallamos nuestro propósito más elevado.
[1] guatemalteca, vive y trabaja en Río de Janeiro. Es doctora en Imagen y Cultura, máster en Artes Visuales y licenciada en Pintura por la UFRJ. Tiene un posgrado en Marketing por la PUC y una licenciatura en Comunicación Social por la UFF. Actualmente es profesora del curso de Escenografía de la Escuela de Teatro Unirio. Como artista, gravita entre los temas del trauma y la política, el consumo y la ironía. Desarrolla estos temas en múltiples soportes que van desde objetos, dibujos y pinturas hasta vídeos y performances. Ha participado en exposiciones en Galeria do Lago, Museu da República, SESC, Caixa Cultural, Instituto Cervantes, Centro Cultural Brasil México, Kassel Video Festival, Deutsches Märchen und Wesersagenmuseum Münster, Centro de Arte Hélio Oiticica, IBEU, Espaço Furnas Cultural, Centro Cultural Justiça Federal, entre otros. Trabajó durante 21 años en el área de marketing en diversas multinacionales norteamericanas, incluyendo los cargos de Gerente en Coca-Cola, Coordinadora para América Latina en Gillette y directora en Mattel y Kodak.
[2] https://www.artsy.net/artist/cyrus-kabiru
[4] https://olafureliasson.net/